El martes fue un día para compartir nuestras experiencias
con las autoridades que visitaron la finca en San Gil para ver el campo de
trabajo. Aunque sólo ha pasado una semana, la experiencia ha sido hasta ahora
tan intensa que el tiempo se ha vuelto muy emocional tanto para los
"jefes" como para los voluntarios. Cada grupo tenía un representante,
Tomás explicó por qué el corazón era un símbolo para los usuarios: dan vida a
todo el proyecto. Todos estamos aquí para ellos y por ellos. Entonces el árbol
de la vida recibió las ramas de los voluntarios SVE y voluntarios españoles y
porque cada día echamos nuestras manos para apoyar y ayudar a los usuarios. Como
lo explico Rita, estamos aquí por amor. Los monitores del campo de trabajo
estaban representados en la forma de la luna y las estrellas porque iluminan el
camino y nos guían en la realización de todas las actividades. Las autoridades
también participaron activamente en la realización del "árbol de la
vida". Con recortes de papel de los pulmones explicaron cómo dan oxígeno
al árbol y que reciben a cambio. La visita fue terminada con un pequeño
aperitivo y bebidas.
Por la tarde, todos los voluntarios fueron a Los Pilones,
que es un lugar increíblemente hermoso. Estábamos caminando hasta el río donde
aprovechamos de nadar y bañarnos en un agua cristalina. Con los pies descalzos
subimos a la Garganta de los infiernos para saltar de las rocas y luego
deslizarnos por las rocas, bajando hasta el puente. En esos momentos uno se da
cuenta de que no necesita mucho para ser feliz, sólo el contacto cercano con la
naturaleza es suficiente para llenar su corazón de serenidad y tranquilidad.
Felicidades a toda la familia que conforma el campo de trabajo de Placer y gracias, muchísimas gracias, por compartir sus experiencias a través de éste blog. Un abrazo desde este rincón del Atlántico ( Canarias )
ResponderEliminar